Situado en la plaza de Helmholtz en el distrito de Ehrenfeld de Colonia, en 1959 se inauguró St. Bartholomew como iglesia parroquial. 55 años más tarde, fue catalogado como monumento y edificio patrimonial histórico. En la actualidad se le ha dado el uso de columbario. Diseñado según los planos funcionales del arquitecto Peter Kissler, el espacio se divide en dos niveles. La capilla se ha mantenido en el centro, rodeada por las bóvedas dispuestas en una concentración geométrica para albergar unas 2400 urnas para el descanso final.
El desafío de St. Bartholomew era poder preservar la sección de la capilla, así como la sección de la bóveda sepulcral en su conjunto, manteniéndolas como dos unidades funcionales independientes. Para lograr ese efecto, el arquitecto pensó en Alphamesh 12.0 como un sistema de cortina que rodeara la parte de la capilla, proporcionando un juego de permeabilidad al aire y transparencia de la luz alcanzable solo mediante una membrana compuesta por varios millones de anillos de bronce. Para dicho juego se apoya sobre un sistema de iluminación artificial que permite enfatizar y realzar dicho juego en una cortina cuyas dimensiones totales son de 250 m2 en altura de 7m. Las luminarias se encajan por ambas caras de la cortina en su borde superior bañando a la malla de arriba a abajo con una luz dorada. Durante los servicios de la iglesia, las luminarias se apagan, iluminando el interior de la capilla y evitando la visión exterior. Durante el día, solo se encienden las luces exteriores, dando a la cortina una neblina de luz bronce brillante.
Nombre del proyecto: Columbarium, Colonia | País: Alemania | Arquitecto / Diseñador: Peter Kissler, Wiesbaden | Photocredit: Dietmar Strauß, Besigheim | Material: alphamesh 12.0 en bronce pulido | Cantidad: aprox. 250 m²